9 razones por las que los niños no terminan la tarea de lectura

Leer suele ser parte de la tarea escolar diaria. ¿Qué hacer si su hijo no termina las tareas que requieren leer? Podría ser una señal de que tiene dificultad con la lectura, o una señal de otra cosa.

Estas son nueve razones por las cuales los niños no terminan su tarea de lectura.

1. Leen lentamente

Los niños leen a diferentes velocidades. Su hijo puede que lea más despacio que sus compañeros de clase. Esto no significa que su hijo sea menos inteligente, sino que podría necesitar tareas de lectura más cortas, más tiempo para hacerlas, o apoyo adicional.

Conozca otras razones de por qué los niños leen con lentitud.

2. Se sienten ansiosos con la lectura

Leer es relajante para algunos niños, pero para otros es estresante. Cuando los niños se sienten ansiosos con la lectura, podrían evitar hacer su tarea de lectura o tardar más tiempo en terminarla. Por ejemplo, si a los niños les preocupa haber pasado por alto algo, podrían releer el mismo texto repetidas veces.

3. Tienen dificultad para concentrarse

Cuando los niños tienen dificultad para concentrarse, podrían empezar a leer y detenerse muchas veces cuando están haciendo la tarea de lectura. Podrían distraerse por cosas como olores y sonidos y ponerse a pensar en otra cosa.

Algunos niños tienen problemas de concentración todo el tiempo o muy a menudo. Otros pueden tenerlos de vez en cuando, o tener dificultad para concentrarse en tipos de libros específicos.

4. Olvidan o no siguen las instrucciones

Los niños pueden olvidarse de terminar su lectura. Algunos saben lo que tienen que leer, pero no lo hacen. Seguir instrucciones es un desafío diario para otros. Tienen dificultad para hacer lo que se les pide que hagan, y eso incluye terminar la tarea de lectura.

5. Se sienten estresados

Que los niños no terminen la tarea podría ser debido a que están estresados. Algo podría estar sucediendo en la escuela o con sus compañeros de clase, como una discusión con un amigo. Podrían estar alterados por el fallecimiento de un familiar cercano o un divorcio en la familia.

Cuando los niños están estresados suelen tener dificultad para concentrarse y seguir instrucciones, lo que a su vez puede afectar la tarea de lectura.

6. No les interesa lo que están leyendo

Muchas veces los niños tienen que leer cosas específicas para la tarea escolar. Puede ser un capítulo del libro de texto de ciencias o un artículo sobre un evento actual. Si el tema no les llama su atención, podrían posponerlo o no leerlo en absoluto. Puede ser útil leer con su hijo esas tareas que son más difíciles o relacionar el tema con algo que a él le interese.

Los niños eligen qué leer en algunas tareas. Sin embargo, los niños pueden elegir libros que terminan no gustándoles. Ayuda que un adulto, como un bibliotecario, sugiera libros para leer que tengan que ver con los intereses de su hijo.

7. Lo hacen en el momento equivocado

Puede que los niños no terminen su lectura porque no están empezando la tarea en el mejor momento. Puede que les vaya mejor si hacen la tarea poco después de terminar la escuela, aunque otros necesitan tener un descanso antes de empezarla. Hay quienes les gusta comenzar por la tarea de lectura, mientras que a otros les gusta terminar con la lectura porque les resulta relajante. Es importante que los niños tengan una rutina de tareas que les funcione.

8. Lo hacen en el lugar equivocado

Lo que funciona para algunos tipos de tarea, puede que no funcione para todas. Por ejemplo, los niños podrían preferir hacer sus tareas de escritura en un lugar tranquilo, sentados en una silla firme y apoyados en un escritorio. Pero cuando se trata de leer puede que les funcione mejor sentarse en una silla más cómoda con música suave de fondo.

9. Tienen demasiada tarea

La lectura puede que sea solo una parte de la tarea escolar que le asignan a su hijo. Cuando a los niños les cuesta terminar la tarea, incluida la lectura, podría ser porque es demasiada cantidad. Tal vez necesiten tomar descansos entre tareas para permanecer concentrados. O dividir la tarea de lectura en partes más pequeñas.

Conozca algunas recomendaciones para hablar con el maestro de su hijo sobre el exceso de tarea.

Una vez que averigüe por qué su hijo no termina la tarea de lectura, puede seguir los pasos necesarios para ayudarlo. Un buen comienzo es hablar con el maestro de su hijo sobre lo que usted está observando en su casa. Tal vez quiera obtener más información sobre por qué los niños tienen dificultades con la lectura.